Simplificar, esa es la cuestión. El objetivo de toda empresa es hacer sus procesos lo más fáciles y eficaces posibles. Todo ello con el objetivo de aumentar la productividad, y minimizar los costes. Y esto es lo que hacemos en Stylepack, donde ofrecemos diferentes servicios que hacen mucho más sencillo el día a día de miles de empresas.
En esta ocasión, como queremos que nuestro blog te sirva para estar al día del sector, te hablamos sobre el kitting. Seguro que, si ya cuentas con nuestros servicios, vas a poder sacar unos pocos minutos para dedicar a esta lectura. Y si todavía no, ahora es un buen momento para que solicites asesoramiento y descubras cómo delegar algunas de tus tareas y tener más tiempo para centrar todo tu esfuerzo y toda tu atención en el corazón de tu empresa.
¿Qué es el Kitting?
Esta estrategia del mundo logístico consiste en agrupar todos los elementos individuales de un producto, en un kit único. Y tenerlo preparado con antelación es clave para que esté listo cuando sea necesite en la cadena de producción, logística o distribución.
Por ejemplo, un kit puede incluir las piezas específicas que se usarán para el montaje un producto. Y en un contexto de envío, un kit podría ser un paquete listo para ser entregado al cliente que contenga todos los elementos de un pedido.
¿Cuál es el objetivo del kitting? Eliminar pasos innecesarios, minimizar el tiempo de búsqueda de componentes y mejorar la eficiencia en cada fase del proceso.
Preparar los Kits con antelación
El primer paso para implementar el kitting es identificar los procesos que pueden beneficiarse de esta estrategia. Esto incluye:
- Definir los materiales o productos necesarios: analizar qué elementos se utilizan repetidamente juntos en los procesos de manufactura o logística.
- Diseñar el flujo de trabajo: planificar cómo se organizarán, almacenarán y distribuirán los kits.
- Asignar un área para preparación de kits: dedicar un espacio específico para el kitting, equipado con herramientas y sistemas que faciliten su montaje.
- Automatizar donde sea posible: si el volumen de kits es alto, considera incorporar sistemas automatizados para reducir errores y acelerar el proceso.
El kitting no solo requiere preparación física, sino también gestión adecuada de inventarios para asegurar que los componentes estén siempre disponibles y se preparen de manera correcta.
Ventajas del Kitting
Vamos a analizar cuáles son las ventajas más importantes del kitting, y con ello, que puedas valorar el beneficio de estrategia logística para optimizar y mejorar tu negocio.
Optimización del tiempo
Agrupar todos los componentes necesarios en un solo kit ahorra tiempo en la búsqueda, selección y transporte de materiales. Esto reduce el tiempo total de producción o despacho de pedidos, acelerando significativamente los procesos.
En operaciones con altos volúmenes de trabajo, como centros de distribución o fábricas, este ahorro de tiempo se traduce en una mayor capacidad de procesamiento y menor tiempo de entrega. Y a su vez, esto se traduce en más clientes satisfechos que van a repetir su experiencia de compra por ha sido rápida y de calidad.
Fluidez en la cadena de suministro
El kitting mejora la coordinación entre diferentes etapas de la cadena de suministro. Al preparar los kits de forma anticipada, las siguientes fases del proceso tienen acceso inmediato a los materiales necesarios, evitando retrasos.
Esto es, sobre todo, beneficioso para empresas con sistemas justo a tiempo (JIT), donde cada elemento debe estar disponible en el momento preciso para evitar interrupciones.
Disminuye errores
Esto es clave también. Al agrupar de manera previa los materiales, se reduce el margen de error en las fases de ensamblaje o envío. Esto significa:
- Menos pedidos incompletos o incorrectos.
- Reducción de devoluciones y reclamaciones por parte de los clientes.
- Mejor calidad en los productos finales al garantizar que se utilizan los componentes correctos.
Un sistema de kitting bien implementado incluye controles de calidad durante la preparación de los kits, asegurando que todo esté en orden antes de enviarse a la siguiente etapa.
Mayor productividad
Al simplificar los procesos y eliminar pasos innecesarios, el kitting permite que los equipos de trabajo sean más productivos. Los empleados no pierden tiempo buscando piezas o materiales, lo que les permite concentrarse en tareas más importantes, como el montaje o el empaquetado.
Esto también mejora la moral del equipo, ya que se eliminan frustraciones comunes asociadas con la falta de organización o la búsqueda de materiales.
Te mostramos un ejemplo de kitting en logística
Imagina una empresa de comercio electrónico que vende artículos electrónicos, como teléfonos móviles y sus accesorios. Sin un sistema de kitting, cada vez que un cliente realiza un pedido, el equipo de almacén tiene que buscar el teléfono, el cargador, los auriculares y otros accesorios que se incluyen, de diferentes ubicaciones del almacén antes de embalar el pedido.
Con el kitting, todos estos elementos se agrupan previamente en un solo kit, etiquetado y almacenado en una ubicación designada. Cuando llega un pedido, el personal solo tiene que recoger el kit completo y enviarlo.
¿Qué beneficios hay en este caso?
- Velocidad: el pedido se prepara en minutos, en lugar de horas.
- Eficiencia: menos personal necesario para gestionar el inventario.
- Satisfacción del cliente: entregas más rápidas y completas.
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